Britney Spears se tomó un descanso de su agitada agenda como superestrella mundial para pasar un fin de semana con su novio y sus dos hijos en Miami.
La princesa del pop regresó a Los Angeles el día de ayer cuando fue vista en el aeropuerto de Miami con su novio de 24 años, Sam Asghari.
La cantante paseaba por las terminales antes de tomar su vuelo.